Los baños, en sus remotos orígenes, se realizaban en el mar o bajo cascadas. ¿Qué usos le damos en la actualidad? Son el complemento perfecto para nuestros rituales habituales con velas. Nos ayudan a mantener la vibración de nuestra petición durante más tiempo.
Todos conocemos las termas romanas como zonas de baño lúdico, pero lo cierto es que esta y muchas otras civilizaciones utilizaban los baños no solo como elemento social, sino como elementos de purificación de cuerpo y alma. Los baños, en sus remotos orígenes, se realizaban en el mar o bajo cascadas, y todavía algunas religiones exigen lavar ciertas partes el cuerpo antes de las oraciones, para presentarse limpio -física y espiritualmente- ante los nuevos caminos.
Estos son denominados baños de despojo, utilizados históricamente para descargar y purificar las malas energías que permanecen ancladas a nuestro cuerpo y en determinados lugares. En la actualidad los usamos como complemento a nuestros rituales habituales con velas, para así mantener la vibración de nuestra petición durante más tiempo.
Son baños o duchas en los que se utilizan determinados aromas o hierbas que nos permiten eliminar las cargas negativas que portamos. Existen infinidad de combinaciones con las que podemos realizar baños: sal gruesa, ruda, clavo miel… Pero en Las Velas de Mariano preparamos las mejores combinaciones para cada petición y con los componentes adecuados para su uso en la piel (Ph neutro).
Se recomienda utilizar los baños en 3 veces, aunque no hace falta que sean consecutivas. Se pueden usar en bañera durante 10 o 15 minutos, pero también los podemos emplear para limpiar espacios, como negocios, por ejemplo, vertiendo el líquido en el cubo de fregar.
Si nuestra petición de limpieza, pasaremos el baño desde lo más interior del espacio hacia la puerta, haciendo salir las malas energías que pudieran estar acumuladas, y luego tiraremos el agua fuera del edificio. Si, por lo contrario, nuestra petición es de atracción, el baño se hará desde el punto más cercano a la puerta hacia el interior del local.
Cada persona transmite energías diferentes que vamos absorbiendo, así como ciertos lugares también se cargan de estas energías negativas, que quedan acumuladas. La acumulación de malas energías puede estancar la prosperidad personal y del negocio. Por eso, los baños de despojo pueden ser el complemento perfecto a nuestros rituales con velas.
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