“A las 2.00h serán las 3.00h” Una de las frases que más escucharemos este fin de semana, ya que la noche del sábado 26 entramos en el horario de verano. A partir de entonces, amanece y anochece más tarde, por lo tanto, disfrutaremos de más horas de sol. Este cambio de hora produce alteraciones en nuestros ritmos. ¡Hoy te explicamos cómo nos afectan y cómo evitarlo!
El cambio de horario produce un pequeño desajuste o desincronización temporal entre las señales externas (luz solar, temperatura…) y nuestras señales internas (ritmos vitales y reloj interno biológico). Aunque el despertador nos indique que nos estamos levantando a la misma hora, el cuerpo sabe que está madrugando una hora más.
¿Qué puede provocar ese desajuste? Las consecuencias son similares a las que provoca el jet lag: cansancio, malestar, somnolencia o alteraciones en el estado de ánimo. Estas molestias pueden durar entre 3 y 7 días, y en algunos casos hasta 3 semanas. Aun y así, estas “minidepresiones” que se asocian al cambio horario son más típicas del otoño, ya que el aumento de horas de luz mejora la energía de las personas. Entonces... ¿Qué podemos hacer para evitar estos síntomas?
Es recomendable que prepares tu cuerpo para el nuevo horario. Los días previos, trata de levantarte 15 minutos antes de lo habitual para empezar a asimilar la nueva rutina. Relaja tu cuerpo antes de ir a dormir para mejorar la calidad del sueño. Te recomendamos usar velitas de lavanda o trabajar con Benigno Manso si estás en una época de estrés. Esto te ayudará mucho a reducir la tensión.
Además de ajustar tus rutinas de sueño, puedes ayudarte en este cambio reforzando tus energías. Aprovecha este fin de semana para hacer baños que potencien la fuerza y la vitalidad. Puedes hacerlo usando en 3 veces el Baño de Despojo de Rayo de Fuerza o realizando una bañera con Sales de Baño de Fuerza mezcladas con algunas hojas de laurel.
Puedes trabajar a nivel mental con el Velón Doble Carga de Quiero Estar Bien. En los días posteriores al cambio de hora, quemar este velón te ayudará a “reparar” las consecuencias provocadas por el nuevo horario de verano, y a trabajar en tus peticiones mentales.
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