Las pulseras de minerales son una de las mejores formas de aprovechar todos los beneficios que nos aportan las piedras. Poder llevarlas encima y en contacto constante con la piel, ayuda a que la transmisión de la energía sea mucho más fácil. Cada mineral posee vibraciones diferentes que nos pueden ayudar en nuestro día a día. Por ello es importante saber seleccionar qué pulsera usar y cómo hacerlo. ¡Te lo explicamos!
Pulseras de mineral en chip, en bola o combinando diferentes piedras. Existe una gran variedad de opciones, pero recomendamos no llevar más de 3 minerales diferentes a la vez, exceptuando aquellas pulseras que tienen combinaciones especiales: 7 chakras, 7 potencias, combinaciones con cuarzos o minerales de la misma tipología.
Es recomendable también no llevar las pulseras de forma permanente, ya que de esta forma podemos acostumbrarnos a sus efectos. Es importante limpiar nuestros minerales y recargarlos de forma asidua. ¿Cómo hacerlo? Usa algún sahumerio como incienso o palosanto y pásalo 7 veces por encima de la pulsera. Una vez hecho esto, déjalo cargando a la luz de la luna durante una noche.
La muñeca derecha está conectada al hemisferio izquierdo de nuestro cerebro, donde se sitúa el pensamiento lógico, la toma de decisiones y la capacidad analítica. Recomendamos colocar en la derecha las piedras consideradas “activas”, es decir, las que aportan fuerza, vitalidad, coraje…
La muñeca izquierda está conectada al hemisferio derecho, que trabaja con el pensamiento intuitivo y la sensibilidad. Por ello, recomendamos usar en esta mano minerales “pasivos”, aquellos que nos proporcionan calma, armonía y nos ayudan en la meditación.
Ahora que ya sabes cómo hacerlo... ¡Anímate a aprovechar el poder de los minerales!
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