Llega el período más esperado para mucha gente, las vacaciones. Después de un largo año de trabajo, obligaciones y estrés, es normal que nuestro cuerpo empiece a comunicarnos la necesidad que tenemos de un buen descanso.
Durante el período laboral nuestras energías se enfocan en que todo lo relacionado con el trabajo vaya bien, seamos productivos y rindamos al máximo. Es por eso que cuando llega la etapa de descanso, nuestro cerebro sigue centrado en esos estímulos y nos impide muchas veces disfrutar. No descansar del estrés de la rutina causa un deterioro tanto en nuestra salud física como mental, por lo que es indispensable regalarnos un tiempo libre de preocupaciones y tareas pendientes.
En ocasiones, liberar la mente de todas las obligaciones puede resultar difícil, por eso hoy compartimos algunos rituales que nos ayudarán a relajarnos y desconectar durante nuestro merecido descanso vacacional 🌞
Durante los primeros días, en los que todavía no nos hemos acostumbrado al ritmo de vida más pausado y tranquilo, darnos un baño relajante nos servirá para cambiar el chip. Crea un ambiente de armonía y paz usando las Sales de Baño Relajación, el Incienso Stick Relajación y música relajante. Una vez esté todo listo, sumérgete en el agua y dedícate un rato a ti mismo, escuchando lo que tu cuerpo pide y tomando distancia de las complicaciones cotidianas.
Tan solo necesitamos una semana de vacaciones para hacer que nuestro nivel de estrés se reduzca. Disfrutar de nuestros hobbies y hacer actividades de ocio nos ayudará a cargar cuerpo y alma de energías positivas. Mientras leemos, pintamos o meditamos podemos encender una Vela Artesanal de Lavanda, así su agradable esencia llenará el ambiente de vibraciones mágicas que nos ayudan a encontrar la sanación espiritual y la relajación.
Una buena herramienta para calmar las emociones es la escritura, esto puede resultar muy terapéutico para liberar las energías negativas acumuladas durante el año. Os planteamos un ejercicio muy sencillo que consiste en escribir en un papel, como nos hemos sentido, que nos ha preocupado, cómo nos gustaría sentirnos y que queremos dejar ir.
Una vez hayamos plasmado todas estas sensaciones, dedicaremos un tiempo a reflexionar sobre ellas antes de encender el Velón Propósito Benigno Manso. Seguidamente, lo encenderemos y quemaremos el papel, dejaremos consumir y disfrutaremos de sus vibraciones positivas que nos ayudarán a soltar toda la tensión y el estrés que tenemos en el cuerpo.
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